Contribución del cociente intelectual premórbido y la edad de inicio de psicosis al rendimiento cognitivo y recuperación funcional de individuos con un primer episodio psicótico

  1. MOLINA GARCÍA, MARÍA DOLORES
Dirigida por:
  1. Marta Rapado Castro Director/a
  2. Celso Arango López Director/a

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 25 de mayo de 2022

Tribunal:
  1. José Luis Carrasco Perera Presidente/a
  2. Ana Isabel Guillén Secretario/a
  3. Rosa Ayesa Arriola Vocal
  4. A. Zabala Rabadán Vocal
  5. Olga Puig Navarro Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Introducción. Existe una gran variabilidad en el perfil de rendimiento cognitivo, la presentación clínica, el curso de los síntomas y el posterior funcionamiento entre individuos con un primer episodio psicótico (PEP). El cociente intelectual premórbido (CI-p) y la edad de inicio de psicosis son dos factores pronósticos que podrían ayudar a explicar la heterogeneidad clínica y cognitiva en individuos con un PEP. La presencia de CI-p bajo es un factor de riesgo de esquizofrenia asociado a alteraciones en el neurodesarrollo, mientras que un CI-p promedio o alto se relaciona con un mejor pronóstico de psicosis debido a su asociación con la reserva cognitiva. Presentar un CI-p inferior a 85 se ha asociado con una probabilidad hasta cuatro veces mayor de que el inicio de psicosis sea temprano, y el inicio temprano de psicosis se asocia a un peor funcionamiento psicosocial. Por tanto, la presencia de una edad de inicio temprana ( < 18 años) y un CI-p bajo podría reflejar un curso diferente del neurodesarrollo. Método. El presente estudio observacional longitudinal prospectivo de dos años de seguimiento examina el perfil neurocognitivo, clínico y funcional en 255 individuos con un PEP, subdivididos en subgrupos según los siguientes criterios: inicio de psicosis anterior o posterior a los 18 años, y CI-p inferior al promedio (CI-p inferior a 85) o dentro del promedio (CI-p de 85 o superior), lo que nos permite examinar si, la presencia de los dos factores de riesgo, inicio temprano de psicosis y CI-p inferior al promedio corresponde a un perfil de paciente con mayor afectación cognitiva, clínica y funcional y menor probabilidad de recuperación, en comparación con los subgrupos que presentan tan solo uno de los factores de riesgo. Además, 326 controles conforman el grupo de comparación en la caracterización neurocognitiva longitudinal de los subgrupos PEP. Las variables dependientes fueron: 1) rendimiento cognitivo en los siguientes dominios: cociente intelectual premórbido, atención y velocidad de procesamiento, memoria de trabajo, memoria y aprendizaje verbal, función ejecutiva y un índice de cognición global; 2) Sintomatología psicótica; 3) Funcionamiento psicosocial 4) Recuperación clínica: presencia simultánea de remisión sintomática y buen funcionamiento en la visita de dos años. Se empleó análisis ANOVA para analizar las diferencias entre subgrupos y ANCOVA para explorar el efecto potencial de las variables medicación antipsicótica y sexo. Se empleó un análisis de varianza de dos factores de efectos mixto para examinar las diferencias entre subgrupos en sus trayectorias cognitiva, clínica y funcional. Resultados. Los subgrupos con CI-p/bajo (inicio temprano e inicio en etapa adulta) demostraron un peor rendimiento cognitivo en todos los dominios cognitivos evaluados en comparación con los subgrupos con CI-p/promedio. El subgrupo de inicio temprano y CI- p/promedio demostró una mejora significativa en el rendimiento de los dominios cognitivos evaluados. Con respecto al perfil clínico, los subgrupos de inicio temprano presentaron una mayor sintomatología y peor funcionamiento en la evaluación basal que los subgrupos de inicio adulto. A los dos años, el subgrupo de inicio temprano con CI-p/bajo presentó una mayor gravedad de sintomatología negativa y mayor puntuación de sintomatología total a los dos años de seguimiento, peor funcionamiento y una menor tasa de remisión clínica, aunque únicamente fue significativamente diferente del subgrupo de inicio adulto con CI-p/promedio. Conclusiones. Nuestros resultados sugieren que la presentación temprana de síntomas psicóticos en pacientes con un CI-p inferior al promedio se asocia a un perfil de déficit cognitivo global y una menor tasa de recuperación funcional a los dos años de seguimiento. La estimación del CI-p en etapas tempranas puede ayudar a identificar aquellos individuos que requieran de una intervención personalizada de corte neurocognitivo.