Medida y monitorización de las perturbaciones de baja frecuencia en sistemas eléctricos

Resumen

Tras más de un siglo de desarrollo en la implantación de la energía eléctrica es en la última década en la que toma un papel relevante el concepto de calidad en el suministro eléctrico. El aumento de cargas no lineales, debido a la creciente utilización de la electrónica de potencia, hace que los parámetros característicos que definen la señal de tensión (amplitud, forma de onda, frecuencia y equilibrio trifásico) sufran desviaciones respecto a sus características ideales, pudiendo afectar negativamente a otros equipos conectados a la red, provocando un mal funcionamiento o incluso daño irreparable de alguno de sus componentes. El concepto de energía eléctrica ha variado pasando de ser considerada un servicio a ser visto como un producto que necesita acreditar y se le puede exigir una cierta calidad medible y cuantificable. En los últimos años son numerosos los trabajos publicados sobre estudios de la calidad en el suministro eléctrico que ponen de manifiesto la creciente preocupación de las empresas en el suministro eléctrico sobre la calidad del producto que distribuyen. El aumento del número de aparatos e instalaciones susceptibles de crear perturbaciones y de ser susceptibles a éstas hace que el control de estas perturbaciones y sus consecuencias deban tratarse de forma conjunta. La creciente preocupación por la calidad en el suministro eléctrico va parejo a un esfuerzo en el desarrollo de normativas. Una de las áreas de investigación en el ámbito de la calidad en el suministro eléctrico comprenda las técnicas, instrumentos y aplicaciones para la medida y evaluación de las principales perturbaciones. El presente trabajo se inscribe dentro de esta área. Se ha realizado un único equipo para la monitorización, medida y evaluación de las cuatro perturbaciones conducidas de baja frecuencia más importantes: armónicos de señales de tensión y corriente; fluctuaciones periódicas de tensión