Funcionamiento emocional en las personas muy mayoresvariables descriptivas y predictoras

Abstract

Estudiar el funcionamiento emocional en las personas mayores de 85 años y las variables que lo predicen tiene gran interés, ya que es a partir de esa edad cuando la prevalencia de las enfermedades crónicas aumenta y las limitaciones funcionales, sensoriales y cognitivas también, lo cual pude conllevar que la persona se vuelva más vulnerable en términos emocionales y que su bienestar empeore.OBJETIVOS: En términos generales este trabajo tiene tres objetivos fundamentales: 1)conocer el funcionamiento emocional de las personas mayores de 85 años, distinguiendo dentro de estas a las centenarias, en comparación con los grupos de edad más jóvenes. 2) conocer las variables que tienen mayor peso predictor sobre el funcionamiento emocional en mayores de 85 años; por último, 3) analizar distintos perfiles de envejecimiento ¿considerando, junto con las variables emocionales, el resto de las variables contempladas en esta investigación- y su distribución en los distintos grupos de edad.MÉTODO:MUESTRA: Esta investigación de tipo transversal se llevo a cabo con una muestra de 257 personas, de las cuales 155 eran mayores de entre 65 y 84 años y 102 mayores de 85 años.RESULTADOS: Los resultados mostraron que se hace extensible a edades avanzadas (mayores de 85 años) la relación positiva entre la edad y el bienestar emocional, Asimismo, las personas muy mayores utilizan en mayor medida las estrategias proactivas y la solución de problemas para la regulación emocional, es decir, optan menos por la confrontación directa de las emociones y la solución de problemas. La personalidad y el apoyo social son las variables que mayor peso predictivo tienen sobre las variables emocionales afecto positivo y negativo, satisfacción con la vida y soledad en las personas muy mayores. Sin embargo, y en lo que respecta a las variables predictoras de las estrategias de regulación el funcionamiento cognitivo, la afectividad (afecto positivo y negativo) y, en menor medida, el apoyo social se mostraron como las variables con mayor peso. Finalmente, el perfil de envejecimiento más característico de los mayores de 85 años y centenarios es el de ADAPTADOS. Es decir, estas personas, si bien presentan una peor capacidad cognitiva y funcional, así como mayor comorbilidad, a nivel emocional se caracterizan por tener estabilidad emocional y una regulación pasiva de las emociones